- El CEU, AUARA y la Fundación Esperanza y Alegría se unen para poner en marcha un proyecto social dirigido a mejorar las condiciones de salubridad de un centro educativo en la India, mediante la construcción de aseos para los alumnos
- El proyecto se llevará a cabo gracias al compromiso adquirido por el CEU y a la recaudación obtenida por la venta de botellas de agua AUARA en todos sus Centros repartidos por España
- Según UNICEF, 4.500 niños mueren a diario por carecer de agua potable y de instalaciones básicas de saneamiento
El área de Responsabilidad Social integrada en la Dirección Corporativa de Personas de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, en colaboración con el agua social AUARA, pusieron en marcha en diciembre de 2017 la campaña solidaria “El agua del CEU AUARA” en sus más de 25 centros repartidos por toda España.
La campaña ha estado dirigida a los alumnos, profesionales, padres y familiares de los distintos centros del CEU con el objetivo de garantizar las condiciones de salubridad necesarias para la vida escolar de 1.200 jóvenes del centro educativo Sagaya Matha High School en la India.
Con los beneficios de la compra de cerca de 12.000 botellas AUARA -a fecha de 15 de mayo de 2018- y el compromiso del área de Responsabilidad Social del CEU, la campaña solidaria, saludable y ecológica “El agua del CEU AUARA”, ha conseguido la financiación necesaria para la construcción de aseos y otros recursos que mejorarán las condiciones higiénicas de los estudiantes de Sagaya Matha High School, ubicado en Bharathiyar Nagar, Ennore (India). La campaña ha logrado la participación de todos los alumnos que acuden a los distintos centros del CEU, así como de profesores y familiares.
Tras esta estrecha colaboración entre el CEU y AUARA, la Fundación Esperanza y Alegría será la encargada de ejecutar el proyecto junto con el párroco de Sagaya Matha, Father Ignatius, impulsor también del centro educativo de dicha localidad. Sagaya Matha High School es una escuela de primaria y secundaria que ha ido creciendo en los últimos años debido al aumento de la demanda educativa por parte de la población de la zona, que ha llegado a recibir a más de 1.200 estudiantes de comunidades de pescadores y familias repatriadas de Birmania que viven en el barrio de Ennore.
El proyecto ha consistido en la construcción de 30 inodoros y letrinas para chicos y chicas con un área de lavado. La consecuencia directa derivada del proyecto será la mejora de la salubridad de los escolares y el personal del centro, permitiendo que entre un 80% y el 100% de alumnos terminarán con éxito la enseñanza primaria y secundaria.