Las formas y métodos de ayuda al tercer sector –ONG’s– se reinventan con la digitalización. Redondeos solidarios, tiendas que ofrecen un % de la venta, causas que captan fondos mediante crowdfunding o donaciones mensuales de 1€. Todas valen y son eficaces para obtener dinero y ayudar a las ONG’s. Los métodos tradicionales, a pié de calle o mediante llamadas telefónicas se quedan obsoletos.
Según los últimos datos ofrecidos por Compromiso Empresarial el número de Donantes Tributarios Españoles que declaran una donación es de 5,16 millones. Y la Donación Promedio declarada de 507€ en el 2018.
Tossall es una startup que mediante su aplicación facilita la donación a las ONG’s, no con dinero, sino con nuestras cosas y pertenencias que no utilizamos o no nos son imprescindibles.
¿Tienes una silla de bebé que no utilizas, ropa, móviles, electrónica o una bicicleta? Lo que para ti no vale o no usas es dinero efectivo para las ONG’s.
Tossall ha desarrollado una app que permite subir fotos y características de los productos, servicios o experiencias que quieras donar poniéndolos a la venta con el precio que estimes y eligiendo la ONG’s destinataria del 100% del dinero que se obtiene de su venta. Ya no hace falta tener dinero en el banco para ayudar y ser solidario.
Esta startup disruptiva en el área de la captación de fondos para ONG’s mediante un formato Marketplace ha sido desarrollada por un padre y sus dos hijos (Javier Mengotti y sus hijos Javier y Miguel) y ya han levantado fondos de Entidades como +ESIC.
Más de 60 ONG’s ya se están beneficiando y obteniendo fondos de las donaciones realizadas y adquiridas por compradores solidarios. En tan solo dos meses, ONG’s de ámbitos tan dispares como la investigación, docencia, infancia, protección animal, enfermedades raras o conservación del medio ambiente se han adherido a esta iniciativa solidaria esperando que personas y empresas donen las cosas que no utilizan y sean monetizadas en la plataforma. Para las empresas supone una herramienta sencilla y con resultados inmediatos para elevar su faceta social y cumplir sus políticas RSC.
Las empresas con propósito y fines sociales son, sin duda, tendencia y fundamentales para la consecución de los Objetivos 2030.