(Sevilla).- La Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia (SAGO) ha publicado un decálogo de recomendaciones sobre COVID19 y embarazo en el que subraya la importancia de mantener la lactancia materna desde el nacimiento y destaca que no hay evidencia de transmisión transplacentaria del virus o de que pueda provocar algún tipo de malformación. El decálogo, aprobado por la Junta Directiva de la SAGO este fin de semana, lleva por lema ‘Cuídate, cuídale, cuídanos’.
La sociedad científica andaluza, que conforman cerca de un millar de ginecólogos y obstetras de la comunidad autónoma, ofrece en su decálogo respuestas a las preguntas más frecuentes que se hacen las mujeres durante su estado de gestación ante el impacto de la COVID19, como qué efectos tiene el Coronavirus en las mujeres embarazadas, si una mujer infectada puede transmitir el COVID19 al feto o si es recomendable la vacunación en las embarazadas. “Queremos contribuir a la divulgación de una información rigurosa, adecuada y útil en un período decisivo para la vida de una mujer”, afirma el presidente de la SAGO, Jesús Jiménez, que es jefe de Servicio de la Unidad de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitario de Málaga.
Pese a los cambios inmunológicos y fisiológicos que las mujeres embarazadas experimentan durante el proceso de la gestación, no hay datos que evidencien que las embarazadas enfermen más que las mujeres de su misma edad no embarazadas. En este sentido, la SAGO reconoce que no está demostrado que las mujeres con infección por Coronavirus tengan peores resultados obstétricos, aunque admite en su Decálogo que “sí hay un riesgo levemente aumentado de prematuridad debido a la necesidad ocasional de finalizar el embarazo si se produce un empeoramiento clínico”.
Para los ginecólogos y obstetras andaluces no hay evidencia de la transmisión de la infección o de la enfermedad. “Hasta la fecha –sostienen-, se descarta la transmisión del Coronavirus al recién nacido tanto intraútero como por el canal del parto, motivo por el que la vía vaginal es la preferible en la mayoría de los casos”.
El embarazo no aumenta el riesgo
La SAGO deja bien claro que el embarazo no aumenta la probabilidad de contraer la infección. “Lo más importante es que se cumpla con las recomendaciones del Ministerio de Sanidad tales como lavarse las manos con regularidad y eficacia tras estar en lugares públicos, evitar lugares cerrados, mantener la distancia con otras personas y utilizar mascarillas homologadas”, afirma el punto referido a qué hacer para reducir el riesgo de contraer el Coronavirus durante el embarazo.
En el caso de presentar fiebre, tos o síntomas respiratorios o haber estado en contacto con personas infectadas deberá contactar con su Centro de Salud, médico de familia, obstetra o matrona para que le asesoren sobre los pasos a seguir. Y en el caso de un agravamiento de los síntomas tendrá que consultar entonces con un Servicio de Urgencias. Los medicamentos antitérmicos, como el Paracetamol, son seguros durante el embarazo y pueden ayudar a tolerar mejor los síntomas.
¿Cómo repercute la pandemia del Coronavirus en el control de su gestación? es otra de las preguntas que se plantea el Decálogo de la SAGO. Y la respuesta es que la COVID19 no cambia ese control y que la atención a las embarazadas se va a mantener siguiendo los controles habituales y las citas obstétricas previstas aunque dependiendo de la situación epidemiológica las autoridades sanitarias pueden establecer limitaciones en el acompañamiento en las consultas y, como medida de prevención y con objeto de proteger a las gestantes y a los profesionales que las atienden, es posible que se le pueda solicitar que entre en la consulta sin acompañante. Si los días previos a una revisión presenta síntomas de infección respiratoria, se recomienda contactar con su Centro de Salud o con la Consulta de Obstetricia y si esta situación coincide con una exploración ecográfica se le facilitará otra cita de acuerdo con sus semanas de gestación.
En el caso de haber dado positivo, los profesionales sanitarios establecerán los controles necesarios, según el grado de afectación y las semanas de embarazo a través de los equipos multidisciplinares que integran obstetras, internistas, médicos de familia y matronas, entre otros. Desde el inicio de la pandemia se ha avanzado mucho en el manejo de la enfermedad y los especialistas sanitarios han ido incorporando diversos fármacos que han resultado eficaces para evitar complicaciones, como la heparina de bajo peso molecular para prevenir trombos o corticoides en ciclos cortos para mejorar la neumonía. Para la SAGO son fármacos muy seguros durante la gestación y que pueden usarse, siempre bajo supervisión médica.
Parto y lactancia
La atención al parto va a ser similar a una gestante sin Coronavirus salvo por el hecho de que se realizará en una sala con las medidas de prevención adecuadas y los profesionales utilizarán equipos de protección especiales.
Los obstetras andaluces reconocen que el parto vaginal es seguro, por lo que no encuentran razones en la actualidad para hacer una cesárea por el hecho de haber sufrido la enfermedad de la COVID-19. Según las situaciones de cada Servicio podrá estar acompañada en todo momento durante el proceso del parto y puerperio.
Por otra parte, la infección activa por Coronavirus tampoco contraindica el uso de la analgesia epidural. Al inicio de la pandemia algunas guías desaconsejaban el uso de la analgesia inhalatoria (óxido nitroso) durante el parto, pero en la actualidad su uso está admitido siempre que se cumplan con las medidas higiénicas y de protección adecuadas, subraya el Decálogo de la SAGO.
Esta Sociedad científica considera importante insistir en los beneficios de la lactancia natural. Aunque preocupa la posible transmisión madre-hijo durante el amamantamiento, se recomienda el mantenimiento de la lactancia materna desde el nacimiento, siempre que las condiciones clínicas del recién nacido y su madre lo permitan y que se cumplan las medidas de prevención tales como la higiene de manos y del complejo areola-pezón, el uso de mascarilla y el mantenimiento de la distancia tras cada toma. Y si ha pasado la enfermedad no hay ningún inconveniente para que amamante a su bebé y le aporte todas las ventajas que implica la lactancia natural.
Respecto a la vacuna subrayan que no existe en la actualidad evidencia científica que permita recomendar la vacunación contra la COVID19 en las embarazadas. En este sentido, los ginecólogos y obstetras andaluces seguirán las directrices que en cada momento vaya estableciendo el Ministerio de Sanidad.
“Es fundamental que las mujeres afronten su período de embarazo con las mayores garantías”, reconoce el presidente de la SAGO, “de ahí que sintamos la obligación profesional de transmitirles certeza, seguridad y tranquilidad ante los temores que provoca la expansión de la COVID19 para que la gestación se desarrolle dentro de los mayores parámetros de normalidad posible”, concluye el doctor Jesús Jiménez.
La Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia, que ha celebrado varias mesas redondas sobre COVID19 y embarazo dirigidas a profesionales sanitarios, se convierte así en la primera sociedad científica que publica recomendaciones dirigidas específicamente a las mujeres embarazadas frente a la COVID19 y va a difundir su Decálogo entre todos los responsables sanitarios para contribuir a su máxima difusión entre la población a la que va dirigida.