- Casi 44.000 niños viven bajo una medida de protección en España, ya sea de acogimiento residencial o familiar
- El proyecto «Preparados para emanciparse» considera fundamental promover la capacitación de los profesionales que acompañan a estos jóvenes garantizándoles, un exitoso proceso de emancipación e integración en la sociedad
- La participación juvenil es uno de los ejes centrales del proyecto. En total, serán 130 jóvenes los que participarán en sus diferentes etapas
Casi 44.000 niños viven bajo una medida de protección en España, ya sea de acogimiento residencial o familiar. La mayoría de edad supone el cese de esta medida protectora y hace que estos jóvenes tengan que enfrentarse a un proceso de transición a la vida adulta muy diferente al del resto de sus iguales.
Para tratar de facilitar este proceso y adaptarlo a las necesidades reales de estos jóvenes, Aldeas Infantiles SOS ha puesto en marcha el proyecto Preparados para emanciparse, cofinanciado por la Unión Europea.
Se trata de un proyecto de dos años cuyo objetivo es garantizar a los niños y jóvenes un sistema de protección infantil en el que los profesionales y los educadores que los acompañan tengan la mejor preparación posible y cuenten con las herramientas necesarias para garantizarles un exitoso proceso de emancipación e integración en la sociedad. La participación juvenil es uno de los ejes centrales del proyecto. En total, serán 130 jóvenes los que participarán en sus diferentes etapas.
En el marco del proyecto, Aldeas Infantiles SOS ha llevado a cabo diferentes iniciativas para comprender mejor la situación de los jóvenes que abandonan el sistema de protección y los factores que pueden determinar una transición con éxito a una vida independiente. Una de estas acciones ha sido la realización de un estudio piloto que incluye 68 entrevistas en las que entrevistadores y entrevistados son jóvenes emancipados procedentes del sistema de protección.
Preparados para emanciparse, Aldeas Infantiles SOS considera fundamental promover la capacitación de los profesionales que acompañan a estos jóvenes y les ofrece una formación fundamentada en cuatro principios rectores: forjar relaciones duraderas basadas en el cuidado y el respeto entre acogedores y acogidos; lograr una mayor participación de los jóvenes en la toma de decisiones que les afectan; promover y proteger los derechos de los niños y jóvenes; y fortalecer una coordinación intersectorial que garantice la colaboración de todos los agentes implicados en el proceso de emancipación de los jóvenes.
Así Aldeas ha elaborado unas sesiones formativas que imparte a un total de 400 profesionales con el fin de que estos puedan preparar mejor a los jóvenes en su camino hacia la autonomía y la independencia.
50 años acompañando a los jóvenes
Aldeas Infantiles SOS lleva 50 años ofreciendo un hogar y una familia a aquellos niños privados del cuidado parental y acompañándolos, más allá de los 18 años, hasta que logran integrarse con éxito en la sociedad. En 2017, la organización acompañó a un total de 820 jóvenes en todo el territorio nacional.
“Desde Aldeas Infantiles SOS somos plenamente conscientes de las incertidumbres por las que atraviesan estos chicos al cumplir la mayoría de edad y tratamos de ayudarles para que su proceso de emancipación sea más fácil, brindándoles las mismas oportunidades que tendría cualquier chico de su edad”, asegura Pedro Puig, presidente de la organización.
A través de los cuatro proyectos que integran los programas de Jóvenes de la organización (Tránsito a la Vida Adulta, Autonomía, Emancipación y Servicio de Empleo), Aldeas Infantiles SOS ofrece una respuesta individualizada a las necesidades de cada joven y les procura los apoyos necesarios hasta conseguir su correcta integración social y laboral, con independencia de su edad.
Aldeas Infantiles SOS
Aldeas Infantiles SOS, presente en España desde 1967, es una organización internacional, privada, de ayuda a la infancia, sin ánimo de lucro, interconfesional e independiente de toda orientación política. Se fundó en 1949 en Imst (Austria) y hoy está presente en 134 países. En 2016 fue galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia.
Su misión es atender a niños y jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad, impulsando su desarrollo y autonomía mediante el acogimiento en entornos familiares protectores y el fortalecimiento de sus redes familiares, sociales y comunitarias. Trabaja para fortalecer a las familias vulnerables, de modo que puedan atender adecuadamente a sus hijos; protege a los niños que se han visto privados del cuidado parental, a los que brinda un entorno familiar protector en el que puedan crecer sintiéndose queridos y respetados, y acompaña a los jóvenes en su proceso de maduración e independencia.