- El profesor Berríos, de la Universidad de Cambridge, asegura que existen dos tipos de síntomas mentales, unos de origen orgánico directo y otros de origen simbólico o emocional.
- Defiende que la investigación psiquiátrica desarrolle criterios clínicos para identificar estos dos tipos de síntomas antes de instaurar el tratamiento.
(Alcalá de Henares, Madrid).- El profesor Germán E. Berríos, catedrático emérito de Psiquiatría de la Universidad de Cambridge, ha recibido la medalla de Maestro de la VII Lección Magistral Andrés Laguna que otorgan la Universidad de Alcalá y la Fundación Lilly. Bajo el título “Andrés Laguna y la psiquiatría”, el profesor Berríos ha analizado durante su conferencia las referencias y aproximaciones a la mente y sus aflicciones en la obra Andrés Laguna, así como las ideas que sobre los síntomas mentales ha propuesto la escuela de Cambridge.
El profesor Germán E. Berríos ha llevado a cabo su investigación en Neuropsiquiatría, Psicopatología, Historia y Epistemología de la Psiquiatría apoyado por generaciones sucesivas de estudiantes quienes, en su conjunto, constituyen lo que ahora se conoce como la escuela de Cambridge. El hilo conductor de esta investigación ha sido la interrogante de cómo se forman los síntomas mentales. Ésta ha dado lugar a la propuesta de un modelo configurador que, según estos investigadores, genera dos tipos de síntomas.
El primero, ha subrayado el profesor, “se originaría en un daño cerebral primario que enviaría señales de aflicción a la conciencia del sujeto y que forzaría al mismo a gestionarlas tanto cognitiva como emocionalmente a través del uso de plantillas semánticas aprendidas de la cultura en que vive”. El segundo tipo tendría su origen primario en conflictos intersubjetivos y nudos simbólicos. Este segundo tipo correspondería a lo que históricamente se conoce como “enfermedad psicógena”. Aun cuando ambos tipos de síntomas tienen localización cerebral, solo en el primer caso tal inscripción es primaria y estable; en el segundo es solo secundaria y temporal.
Esta diferencia tiene consecuencias terapéuticas importantes: en el primer tipo el tratamiento ha de ser biológico y dirigido a la zona cerebral que genera el síntoma; en el segundo tipo el tratamiento debe dirigirse al nudo patológico psicogénico. Por ello, el profesor de Cambridge ha señalado que “el próximo paso en la investigación psiquiátrica debe ser el desarrollo de criterios clínicos para identificar estos dos tipos de síntomas antes de instaurar el tratamiento”. Asimismo, ha finalizado, “la decisión de suprimir la distinción entre síntomas psiquiátricos orgánicos y funcionales ha sido precipitada y está dañando la investigación”.
En su conferencia, Berríos ha tratado cuatro aspectos de la obra de Laguna que se pueden considerar como relevantes a la enfermedad mental: la fisiognómica, que estudia la presunta relación entre los aspectos físicos y la interioridad psicológica; la catalepsis y el catoche, que consisten en la súbita suspensión motora y sensorial de la persona; la traducción del Dioscorides llevada a cabo por Laguna que incluye información sobre las drogas atropínicas, cuyo uso terapéutico puede causar disturbios mentales, y la carta de Hipócrates sobre la locura de Demócrito.
En el acto, presidido por el rector de la Universidad de Alcalá, el profesor José Vicente Saz, también han participado el presidente de la Fundación Lilly, Nabil Daoud, y el director de la Fundación Lilly, José Antonio Sacristán, quien ha querido destacar que el profesor Germán E. Berríos “es uno de los psiquiatras más influyentes del mundo. Formado en las Universidades de San Marcos (Lima), Oxford, Leeds y Cambridge, es actualmente Catedrático Emérito de la Universidad de Cambridge, Fellow Vitalicio del Robinson College y fundador de una escuela de psiquiatría y psicopatología pionera en la cual 17 de sus miembros son psiquiatras y psicólogos españoles”.