La consejera de Salud, María Martín, acompañada por la directora general de Prestaciones y Farmacia, Carmen Sáenz, y por la directora de Atención Primaria y 061, Rosa Garrido, ha presentado la actividad registrada en los centros de salud de La Rioja en 2015, en la que se confirma la reducción de los desplazamientos al médico de familia y al pediatra gracias a la implementación de la receta electrónica.
De esta forma y comparando ejercicios ya cerrados, los médicos de familia de La Rioja han registrado 225.000 consultas menos que en 2014; se trata de un 12,4% menos (de 1.805.492 contabilizadas en 2014, a 1.581.526 el pasado año). En cuanto a pediatría sucede otro tanto, ya que se han registrado 16.419 consultas menos, un 7% (de 234.690 consultas en 2015 se ha pasado a 218.271). Aunque la disminución ha sido significativa en las visitas a los médicos de familia y pediatría, la reducción también se ha dejado notar en las consultas de enfermería, en torno a un 7 %, comparando 2015 sobre 2014.
Una de las mayores ventajas de la receta electrónica, además de que este sistema ha permitido una mejor organización de la medicación, ha sido la descongestión en las consultas al reducirse las visitas de los pacientes.
La frecuentación a las consultas de los enfermos crónicos o de los pensionistas ha disminuido y las cifras confirman esta percepción. En una primera evaluación y comparando el último trimestre de 2014 (cuando ya estaba plenamente operativa la receta electrónica en todos los centros de salud de La Rioja) con el mismo período de 2013, la Consejería de Salud ya constató que, tras la puesta en marcha de la prescripción electrónica, que se había producido un descenso de un 8,7 % de consultas de medicina de familia (lo que en cifras absolutas suponía 39.400 consultas menos).
Desde la implantación de la receta electrónica en mayo de 2014 a diciembre de 2014, el número de recetas prescritas electrónicamente fue de un 74% y en soporte papel un 26%. En el año 2015, del total, 6.044.216 recetas, el 92% fueron electrónicas, lo que supone 5.547.864 y el resto, un 8%, en soporte papel.
Este sistema además ayuda a mejorar la adherencia terapéutica en los pacientes crónicos debido al mayor control del paciente por parte del médico y farmacéutico y simplifica enormemente el proceso de facturación a través del colegio.
Carpeta de Salud del Ciudadano
En la Carpeta de Salud del Ciudadano se condensa la totalidad de la historia clínica del paciente y solamente puede ser consultada por él, a través de certificado de firma electrónica.
Para mejorar la accesibilidad del ciudadano y la información sobre este sistema, la Consejería llevó a cabo la campaña ‘La receta, en tu tarjeta’ y facilitó un nuevo acceso de información farmacéutica en la Carpeta de Salud del Ciudadano en www.riojasalud.es. De esta forma, todos los usuarios del Sistema Público de Salud de La Rioja acceden a la información sobre las recetas prescritas y pendientes de dispensar, así como el rango de fechas entre las cuales es posible recoger dicha medicación en las farmacias. Hasta la fecha, desde agosto de 2014, se han registrado 18.812 accesos a la información farmacéutica desde la web.
Para los usuarios que carecían de firma electrónica, el sistema de salud puso en marcha en marzo de 2015 un método presencial de certificación para facilitar el acceso de los usuarios a su Historia Clínica Electrónica (HCE) y otras informaciones sanitarias, como receta electrónica, a través de la app Rioja Salud, en varios centros designados; en este momento, todos los centros de salud están facultados para facilitar el acceso de los usuarios a su historia clínica. Desde marzo de 2015 hasta ahora se han contabilizado 8.553 accesos desde la app móvil.
El sistema también incluye información sobre los medicamentos que necesitan visado, es decir, aquellas recetas prescritas que, por diferentes razones, necesitan la supervisión y aprobación de la inspección antes de poder ser retiradas de las farmacias. La aplicación ofrece también la posibilidad de que los ciudadanos puedan acceder al documento denominado ‘hoja de medicación activa’ y cuya función es servir de orientación al ciudadano para la toma de los medicamentos que le han sido prescritos. La Rioja ha sido la primera comunidad en poner a disposición este dispositivo que mejora la accesibilidad al sistema y amplía la información sobre receta electrónica.