- El PAPE es el instrumento para la programación y coordinación de las políticas de activación para el empleo que tienen previsto desarrollar tanto las comunidades autónomas como el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) con cargo a los fondos que serán distribuidos por este último
- Contiene un total de 617 servicios y programas, frente a los 538 de 2017, lo que supone un incremento del 14,7%
- Por primera vez recoge los objetivos-clave que utiliza la Red de Servicios Públicos de la UE para evaluar el desempeño de todos ellos
El Gobierno y las comunidades autónomas acuerdan el Plan Anual de Política de Empleo de cara al próximo año. El PAPE 2018 será remitido al Consejo de Ministros para su aprobación en las próximas semanas.
El PAPE es el instrumento para la programación y coordinación de las políticas de activación para el empleo que tienen previsto desarrollar tanto las comunidades autónomas como el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) con cargo a los fondos que serán distribuidos por este último. Para 2018 contiene un total de 617 servicios y programas, frente a los 538 de 2017, lo que supone un incremento del 14,7%.
La novedad más significativa que incorpora es que, en cumplimiento de la Estrategia Española de Activación para el Empleo (EEAE) 2017-2020, por primera vez recoge los objetivos-clave que utiliza la Red de Servicios Públicos de la UE para evaluar el desempeño de todos ellos.
Además, incluye, como referencias acordadas en la Conferencia de Presidentes del 17 de enero, los objetivos estratégicos de promover la activación y mejora de la empleabilidad de los jóvenes; potenciar el empleo como principal instrumento de inclusión social y la inserción de los desempleados de larga duración y los mayores de 55 años; impulsar una oferta formativa dirigida a un mercado laboral cambiante; mejorar el desempeño de los Servicios Públicos de Empleo (SPE), y abordar las políticas de activación desde una perspectiva holística.
Todos ellos, junto a los objetivos estructurales, se evaluarán a partir un total de 27 indicadores y 44 componentes.
Desde 2013 el cumplimiento de objetivos se ha tenido en cuenta para el reparto territorial de los fondos de forma creciente hasta llegar al PAPE 2017, aprobado por el Consejo de Ministros el pasado viernes, en el que se establece que la distribución de fondos se hará de forma completa en función de los resultados de los años anteriores. Esta distribución se continúa en el PAPE 2018.
Esto es, en línea con una de las prioridades de la EEAE 2017-2020, que avanza en la modernización y coordinación de los SPE, como se desprende del mandato de la Conferencia de Presidentes, «aumentando la eficacia y la eficiencia de las Políticas Activas de Empleo, y avanzando para ello en la evaluación de las mismas en función de resultados y su planificación en el primer trimestre del año».