- Es uno de los centros elegidos a nivel mundial para colaborar en el estudio en el que participan clínicas de Europa, EEUU e Israel
- En esta investigación internacional participarán un total de 1.000 pacientes
- Esta investigación suma la número 44 que la clínica lleva a cabo para contribuir a mejorar la calidad de visión de la población con afecciones oculares
El Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla, clínica de referencia internacional en retina, es uno de los centros elegidos a nivel mundial para colaborar en un ensayo clínico, junto a otros centros de Europa, EE.UU. e Israel, para evaluar la eficacia de un nuevo fármaco para tratar las patologías de retina.
“Se trata del OPTHEA-320 que es un fármaco con el que se busca mejorar su eficacia en las enfermedades de retina en combinación con otro fármaco ya conocido, el ranibizumab. El objetivo es mejorar la visión del paciente consiguiendo que los efectos de este nuevo tratamiento sean más duraderos en el tiempo, reduciendo así la frecuencia del tratamiento inyectable”, explica el director médico del Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla, el Prof. Francisco Gómez-Ulla.
Reclutamiento de pacientes
El Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla está llevando a cabo el reclutamiento de pacientes para dar comienzo a este nuevo ensayo clínico. Para esta fase de reclutado la clínica está teniendo en cuenta en su criterio de inclusión que sean pacientes con Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) en su forma húmeda de nuevo diagnóstico, es decir que no hayan sido tratados previamente para esta patología ocular. Atendido a este criterio, la clínica reclutará un mínimo de seis pacientes que se sumarán al total de personas que conformarán la muestra de este ensayo clínico internacional y que suma 1.000 pacientes.
Resultados a dos años vista
El ensayo, que se centrará en el estudio de dosis variables de OPTHEA-320 intravítrea después de la administración con ranibizumab, en comparación con ranibizumab sólo, se extenderá durante 24 meses. “Esperamos tener resultados que evidencien los efectos a largo plazo de este nuevo tratamiento en dos años”, afirma el Prof. Gómez-Ulla.