- Tienen por objeto apoyar proyectos de emprendimiento promovidos por personas con discapacidad, así como programas específicamente dirigidos a la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad.
- Los tres proyectos ganadores recibirán una dotación económica de 3.000 € y un servicio de aceleración de startups de Fundación ONCE.
(Madrid).- El jurado de los premios “Emprende y Discapacidad 2018”, puestos en marcha por Fundación Konecta con la colaboración de Fundación ONCE, compuesto por Pedro Tomey, Director General de Fundación Aon, Julio Domingo, Director General de Fundación MAPFRE, Miguel Ángel Valero, Director General del CEAPAT, Jesús Hernández-Galán, Director General de Accesibilidad Universal e Innovación de Fundación ONCE, Luis Cayo, Presidente del CERMI, Ricardo Moreno, Director Cátedra de Emprendimiento Fundación Konecta-Universidad Rey Juan Carlos, Joaquín Garralda, Profesor y Decano de Ordenación Académica del Instituto de Empresa, Mariano Aísa, Presidente del jurado y Vicepresidente de Fundación Konecta, han fallado los tres proyectos de emprendimiento ganadores: BibiBCN, diseño gráfico y de skylines, en la categoría “Negocio innovador”; A 700, comida a domicilio cocinada a baja temperatura, en la categoría “Impacto Social”; y Timpers, zapatillas deportivas diseñadas por personas invidentes, en la categoría “Excelencia en Accesibilidad”.
Cada uno de los tres proyectos ganadores recibirá una dotación económica de 3.000 € y un servicio de aceleración de startups de Fundación ONCE, donde un equipo de expertos apoyará durante un año a modelar la idea de negocio, desarrollar y acelerar el modelo empresarial y conectar con entidades del movimiento asociativo de personas con discapacidad y personas mayores.
El acto de entrega de los premios “Emprende y Discapacidad 2018” tendrá lugar el próximo 10 de octubre en la Fundación Rafael del Pino (Calle Rafael Calvo, 39), a las 12.30 horas.
Esta convocatoria tiene el objetivo de apoyar proyectos de emprendimiento promovidos por personas con discapacidad, así como programas específicamente dirigidos a la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad. Por lo tanto, los miembros del jurado han tenido en cuenta criterios como el carácter innovador y la potencial creación de empleo de calidad, sobre todo de las personas con discapacidad. Además, también se ha evaluado la viabilidad y sostenibilidad económica de las propuestas, su impacto social y la mejora de calidad de vida que supondría a las personas discapacitadas.