La ONG Entreculturas organiza una exposición fotográfica llamada “Somos migrantes” en el CaixaForum de Madrid para acercar la realidad de las personas que se juegan la vida al cruzar fronteras para huir del hambre o el terror.
Según la ONU, 65 millones de personas se encuentran en situación de desplazamiento forzoso. La guerra en Siria, un conflicto sangriento y con tintes internacionales ocasiona un agravamiento de la situación, pero estos conflictos no son aislados, sino que desde República Centroafricana, Sudán del Sur, Afganistán, Colombia, o México se producen éxodos de grandes magnitudes que contribuyen a engrosar las funestas estadísticas. A través de esta exposición gratuita que ha recorrido 20 ciudades españolas y ha sido vista por 52.000 personas, se pretende que sea más fácil para todos ponernos en la piel de los protagonistas de estas situaciones.
Tras recorrer más de 20 ciudades españolas y ser vista por 52.000 personas, la muestra, que es gratuita y consta de 38 instantáneas realizadas por 14 fotógrafos de seis países ocupará la sala tres de CaixaForum Madrid hasta el próximo 8 de enero. La exposición ha sido organizada por la ONG Entreculturas y el Servicio Jesuita a Migrantes-España en colaboración con la Obra Social la Caixa e invitan al visitante a ponerse en la piel de las personas que transitan por corredores migratorios como las fronteras entre México y Estados Unidos, España y Marruecos, el paso del Estrecho o el éxodo de la población Siria.
“La solución pasa por trabajar las causas de la movilidad forzosa”
«La pobreza extrema, la desigualdad y la violencia es lo que genera más movilidad», señala Javier Urrecha Castillo sobre las causas de estos desplazamientos. «La gente no sabe lo que es vivir en El Salvador u Honduras. No solo es el sueño americano, es que en sus barrios les están matando. La gente no se juega la vida porque sí», defiende. Y pasa a explicar el miedo y la esperanza detrás de su instantánea, tomada a finales de 2015 en el estado de Hidalgo, México quien también denuncia que más de un millón de mexicanos y 300.000 centroamericanos intentan cruzar la frontera y sólo el 15% lo consigue.
La solución, insiste, pasa únicamente por trabajar en las causas de esta movilidad forzosa. «Lo que se está criticando de Trump en México lo estamos haciendo en Europa. El Mediterráneo es una fosa común de miles de personas que se están muriendo cada año. Mientras nosotros no reduzcamos la violencia, la desigualdad y demos oportunidades de educación y empleo en los países de origen esto lo único que puede hacer es crecer», concluyó.