- En sus 30 años de existencia ha apoyado 1.746 proyectos.
(Madrid).- Un total de 68 emprendedores con discapacidad pudieron poner en marcha sus iniciativas durante 2018 gracias al apoyo de Fundación ONCE a proyectos de emprendimiento o creación de empresas de la economía social por parte de personas con discapacidad.
El objetivo de estas ayudas, que Fundación ONCE ofrece en calidad de Organismo Intermedio del Programa Operativo del Fondo Social Europeo de Inclusión Social y Economía Social 2018-2022 (Poises), es fomentar el empleo y mejorar la empleabilidad y la inserción socio laboral del colectivo.
Desde la puesta en marcha de esta iniciativa de fomento del autoempleo en 1988, se han dado ayudas a un total de 1.746 emprendedores con discapacidad.
En esta edición, de nuevo los proyectos aprobados acumulan un alto grado de innovación. Entre las iniciativas presentadas, figuran, por ejemplo, un parque de cultivo de almeja, un albergue de peregrinos, una academia de formación en lengua de signos o un proyecto de venta online de cómics descatalogados.
Además, hay varias iniciativas relacionadas con el turismo, la organización de actividades recreativas o con la restauración de muebles y cursos. También un proyecto liderado por un joven afiliado a la ONCE que diseña zapatillas personalizadas en braille.
De las 68 ayudas concedidas un 60 por ciento fueron destinadas a hombres y un 40 por ciento para mujeres. En cuanto a la distribución geográfica, 26 son de Andalucía, 11 son de Cataluña y 10 de Galicia. En Asturias se han aprobado 5 proyectos, 4 en Madrid y en Murcia 3. Se han concedido 2 ayudas en Canarias, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Extremadura. Por último, se ha aprobado un proyecto en Castilla y León.
AYUDAS.- En el periodo de ejecución 2018-2022, Fundación ONCE destinará 2,6 millones de euros para impulsar el emprendimiento de personas con discapacidad. Además, en esta convocatoria se han incorporado criterios específicos para favorecer, por ejemplo, el emprendimiento de las mujeres con discapacidad.
Los emprendedores reciben una ayuda económica fija y mínima de 3.000 euros que se puede incrementar en función de su perfil: hasta 2.000 euros más los colectivos con discapacidad con especial dificultad, entre los que se encuentran personas con parálisis cerebral, enfermedad mental o discapacidad intelectual; 1.000 euros más a las mujeres, los parados de larga duración, los mayores de 45 años y los inmigrantes, y hasta 2.000 euros más a las víctimas de violencia de género, las familias monoparentales y aquellos hogares con todos los miembros en desempleo e hijos menores a cargo.
Por otro lado, también se prima a las empresas que generen empleo para otras personas con discapacidad; a los proyectos que además fomenten el desarrollo de sectores en crecimiento como la agricultura ecológica; a los que contribuyan al desarrollo rural, y a los que tienen que ver con las tecnologías y sociedad de la información, el turismo especializado, servicios de salud, medio ambiente y a los dirigidos a investigación y desarrollo o a la innovación social.
No obstante, la suma total de la ayuda no será, en ningún caso, superior a los 18.000 euros.