- Esta iniciativa se engloba dentro de la campaña mundial, ‘¡Enciende la Esperanza!’, surgida desde Childhood Cancer International y fomentada en España por la Federación Española de Padres de NIÑOS CON CÁNCER.
- En nuestro país, el cáncer infantil es la primera causa de muerte por enfermedad de 1 a 14 años. Es la segunda causa de muerte en infancia y adolescencia, sólo detrás de los accidentes de tráfico.
(Madrid).- ‘#PaintGold’ es la iniciativa que la Federación Española de Padres de NIÑOS CON CÁNCER junto con sus 21 Asociaciones miembro está impulsando en nuestro país para concienciar a la sociedad sobre la problemática del cáncer infantil y así visibilizar a los menores que padecen esta enfermedad. La iniciativa se engloba dentro de la campaña mundial, ‘#EnciendeLaEsperanza’, surgida desde la Childhood Cancer International, la cual sitúa septiembre como mes de sensibilización del cáncer infantil.
Para practicar el #PaintGold sólo hay que pintarse dos rayas doradas en la cara o ponerse un tatuaje del lazo dorado –el cual puede adquirirse a través de la página web de NIÑOS CON CÁNCER- hacerse una fotografía y subirla a las redes bajo el hashtag #PaintGold y #EnciendeLaEsperanza y mencionando los perfiles de NIÑOS CON CÁNCER (Facebook y Twitter: @cancerinfantil; Instagram: @ninosconcancer). El objetivo de esta acción es brindar fuerza y apoyo a todos los menores que están pasando por esta difícil situación.
Además, NIÑOS CON CÁNCER ha creado su propio marco y efecto en la red social Facebook para favorecer la participación de los usuarios y conseguir una mayor implicación.
Desde el año 1978, el lazo dorado es el símbolo que representa a los pacientes de cáncer más jóvenes de todo el mundo. El color dorado honra su valentía en la lucha contra el cáncer infantil y adolescente, representando la esperanza. Este símbolo común ha permitido construir una imagen conjunta de esta problemática, fortaleciendo así su visibilidad e incidencia social.
Es por eso que, por cuarto año consecutivo, durante el mes de septiembre instituciones y monumentos de nuestro país y de todo el mundo se iluminarán y colgarán lazos dorados como símbolo del cáncer infantil para visibilizar la problemática de esta enfermedad. Como novedad de este año, se ha establecido que el 21 de septiembre sea el día más importante de la campaña, en el que se pretende que todos los edificios que hayan accedido a colaborar con esta causa estén iluminados para conseguir una mayor fuerza.
El año pasado fue un éxito, puesto que un total de 185 edificios y/o instituciones iluminaron y/o colgaron en sus fachadas las lonas con el lazo dorado. Además del apoyo institucional, NIÑOS CON CÁNCER realizó un potente llamamiento a toda la sociedad a través de redes sociales bajo el hashtag #EnciendeLaEsperanza, la cual tuvo una gran acogida entre el público.
Durante la última semana, la campaña contó con un total de 1.255.420 impresiones en Twitter y un alcance de 270.207 en Facebook.
La campaña se sustenta en que cada 3 minutos un niño es diagnosticado de cáncer en algún lugar del mundo. Se estima que unos 250.000 menores son diagnosticados con una de las 16 formas de cáncer infantil, que son diferentes de los cánceres de adultos. La ausencia de registros de cáncer infantil en la mayoría de países de todo el mundo ha llevado a los investigadores a la conclusión de que este número está muy subestimado y que un sinnúmero de otros menores con cáncer no se registran y ni se contabilizan. En nuestro país, el cáncer infantil es la primera causa de muerte por enfermedad en niños y adolescentes de 1 a 14 años.
Varios tipos de cáncer infantil son ahora curables; sin embargo, en los países en desarrollo, tan sólo 2 de cada 10 menores sobreviven como resultado de la falta de acceso a medicamentos y tratamientos esenciales. Aunque en los países desarrollados 8 de cada 10 menores habrá sobrevivido a su cáncer después de 5 años o más, las investigaciones demuestran que dos tercios experimentarán los efectos secundarios de su tratamiento, y una cuarta parte de los supervivientes tendrán que hacer frente a consecuencias que ponen en riesgo su salud y su vida debido a su tratamiento contra el cáncer infantil.